Existen varios tipos diferentes de termopares, cada uno con características únicas que los hacen adecuados para diferentes aplicaciones. Algunos de los tipos más comunes incluyen:
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Termopares de tipo K: son los más comunes y utilizados en una amplia variedad de aplicaciones. Están hechos de níquel y cromo y son capaces de medir temperaturas desde -270°C hasta 1372°C
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Termopares de tipo J: son similares al tipo K, pero con un rango de medición de temperatura más bajo, desde -210°C hasta 1200°C.
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Termopares de tipo T: son menos comunes, pero son ideales para mediciones de baja temperatura, desde -250°C hasta 350°C
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Termopares de tipo E: son similares al tipo J, pero con un rango de medición de temperatura más alto, desde -40°C hasta 840°C
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Termopares de tipo N: son similares al tipo K, pero con un rango de medición de temperatura más bajo, desde -270°C hasta 1300°C
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Termopares de tipo R: son similares al tipo S, pero con un rango de medición de temperatura más alto, desde -50°C hasta 1750°C
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Termopares de tipo S: son similares al tipo R, pero con un rango de medición de temperatura más bajo, desde -50°C hasta 1750°C
Hay algunos otros tipos de termopares también, pero los mencionados son los más comunes y utilizados en la mayoría de las aplicaciones.
